La Fiscalía General de la República (FGR) ha presentado una nueva acusación contra ocho personas —seis extranjeros y dos salvadoreñas— por su vinculación con una red de estafa mediante la empresa Venicars, que operaba en redes sociales. Los acusados ofrecían falsos servicios de financiamiento para la compra de vehículos, cobrando adelantos que oscilaban entre los US$800 y US$1,000 sin entregar jamás los automóviles prometidos.
La nueva acción judicial incluye a nueve víctimas identificadas recientemente, quienes también fueron estafadas bajo el mismo patrón fraudulento. El requerimiento fue presentado ante el Tribunal 6° Contra el Crimen Organizado de San Salvador, elevando la presión legal contra los presuntos responsables del esquema de estafa.
Los imputados son Gabriel Andrés Ponce Ruíz, Brayan Alexander Camacho Melean, Francys Dorelys Batson Guzmán, Daniel Alejandro Guzmán, Bryan José Urbano Salazar, Heidy Jhoanna Álvarez Topón, Mabel Ruth Solís y Doménica Elizabeth Flores Rodríguez. Todos enfrentan cargos por estafa agravada y asociación ilícita, según detalló la FGR.
Este nuevo avance judicial forma parte del compromiso de la Fiscalía de garantizar justicia a las víctimas y frenar a quienes utilizan el engaño como método de lucro. El caso Venicars se ha convertido en un emblema de cómo las plataformas digitales pueden ser utilizadas con fines ilícitos, y de la necesidad de reforzar la regulación de este tipo de servicios en El Salvador.
